Queridos compañer@s:

Me dirijo a todos vosotros en mi condición de Presidenta de GAP AUDITORES, algo de lo que me siento muy honrada y sobre todo agradecida. El Consejo de Administración ha querido que así sea y lo asumo consciente de la gran responsabilidad que ello supone, pero la gran ilusión con la que afronto este nuevo reto lo supera con creces.

Hace ahora 20 años que me ofrecieron la oportunidad de ser socio, una vez que había superado el exámen de acceso al ROAC y, por supuesto, después de haber demostrado que cumplía con los parámetros de los valores exigidos para formar parte de nuestra organización. Valores que hoy aún siguen vigentes más otros muchos que hemos necesitado incluir para adaptarnos a tiempos más modernos y otros porque la propia regulación así nos lo ha requerido.

Los que conformamos GAP somos conscientes de que el activo más importante de nuestra empresa son las personas, son ellos los que dan sentido a nuestra firma y es a ellos a los que debemos transmitir nuestra pasión por la auditoría. Los auditores desempeñamos una función de interés público dando credibilidad a la información contable de nuestro tejido productivo. Tenemos un papel fundamental tanto en épocas de crisis como en las de crecimiento económico, brindando nuestro apoyo a empresas en su consolidación y recuperación.

Desde GAP también somos conscientes del gran problema que tenemos de captación y retención de talento en auditoría. Sabemos de los problemas y dificultades que tiene el acceso a nuestra profesión que en algunos casos puede hacer parecer que la auditoría no es atractiva y precisamente trabajamos para que esos problemas sean los menos. En nuestra firma nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y tenemos flexibilidad laboral para que los problemas de conciliación no lo sean. Damos todas las facilidades para que quien quiera ser ROAC lo sea aunque no es requisito indispensable para pertenecer a nuestra firma. Y damos todas las oportunidades de promoción que uno quiera, incluso en el ámbito internacional gracias a la pertenencia de nuestra firma a la red internacional FY. En este ámbito, espero que sepamos hacer las cosas bien y que los que venís por detrás seáis nuestros sustitutos.

Sabemos que tenemos grandes retos por delante, entre otros el que estamos asumiendo ahora, como es la adaptación de nuestra firma a las normas internacionales y de control de la calidad, que está suponiendo un antes y un después en nuestra forma de trabajar. Pues incluso esto, lo afrontamos con el convencimiento de que tenemos la capacidad de hacerlo y que además nos va a llevar a ser aún más competitivos. Pero para ello nos toca seguir trabajando conscientes de la responsabilidad que ello supone.

No puedo dejar de mencionar en esta presentación al que fue el verdadero promotor de GAP, Daniel Pastor, que gracias a su capacidad de liderazgo ha conseguido que los que lideramos nuestra firma hoy estemos aquí. Asimismo, tengo que agradecer al que ha sido Presidente de nuestra firma durante más de 20 años, José Manuel Cánovas y que me deja el difícil reto de igualar o superar su gran labor al frente de nuestra firma. Y sobre todo, quiero referirme de una forma muy especial a nuestro querido Vicepresidente, José Enrique Valero, que nos ha dejado recientemente y que ha dejado un hueco en nuestros corazones que difícilmente se va a sustituir.

No creo que haga falta que mencione al resto de personas que hoy aún tenemos la suerte de formar parte de GAP pues aún no es el momento de nuestro homenaje.  A nosotros nos toca seguir trabajado y ser capaces de transmitir la pasión del trabajo que realizamos. Gracias a todos y cada uno de los que trabajáis en nuestra firma, por vuestra dedicación, vuestra vocación, y por dar lo mejor de vosotros mismos. A los más jóvenes, deciros que eso no quedará en valde y seguro que os va a ayudar a crecer personal y profesionalmente y eso redundará en vuestro bien estar y vuestra felicidad.